miércoles, 29 de agosto de 2007

bajando el barco (y la camioneta)


Llevamos el barco al terraplen que se usa para subir a la balsa que cruza a Ita Enramada. Todo muy lindo pero este terraplen termina abruptamente en una pendiente de mas de 45 grados, de tierra floja y piedras sueltas, y donde el rio tiene una profundidad de mas de tres metros a cm de la costa (ya que es donde atraca la balsa). La rampa de hormigón que se usaba antes esta semitapada por tierra y camalotes secos donde dos vacas pastoreaban (camaloteaban?) tranquilamente. Me imagino que la carne saldra con gusto a pescado.
A un costado estaban armando un velerito de Formosa, un microVolker, quienes luego de mucho trajinar con el palo, pusieron motor y marcharon rauda e ilegalmente hacia asuncion, bajo la atenta mirada del marinero de prefectura que atentamente nos observaba.
Mientras tanto preparabamos nuestra maniobra. Mi idea era atar el trailer a la camioneta y bajarlo manualmente, pero Bachi insistio en que lo bajaramos directamente, confiando en la traccion 4x4 de la toyota para salir.
Sin mayor dificultad fuimos bajando el barco, pero debido a la gran pendiente, el trailer se hundio mucho y el barco empezo a apretarse contra la “V” de goma del trailerque sirve para apoyar la proa, tensando el cabo que lo mantenia sujeto al trailer. Sin poder desatarlo, corri a buscar la trincheta y corté el cabo. Cuando se liberó presionó contra el soporte de la goma y lo reventó, cayendo al agua (e inmediatamente rescatado).

Amarramos a un costado, y bachi se subio a la camioneta, acelero a fondo (“si total es 4x4”), y empezo a patinar con dos ruedas. Imposible sacar la camioneta. Pozos debajo de las ruedas, piedras de calce, baldosas para que apoye mejor, empujones tirones, y dos horas de esfuerzos y conseguimos sacarla!!!!. Luego atamos el trailer y lo sacamos con la camioneta.
Ahora a levantar el palo, ya estabamos agotados, y encima un fuerte viento norte nos llenaba de tierra, ya que estabamos a sotavento del terraplen.
Acomodamos el barco, con un ancla a popa, y amarrado de proa al trailer, sin poder varar la orza debido a la profundidad. Pequeño curso de instrucciones para los peones. Peti en tierra cazando de la driza. Bachi y yo con el mastil hombro (como pesa el guacho!), mientras Carlitos acomodaba el pie del mastil en la carlinga. Tuvimos mucha dificultad para levantarlo, ya que el barco se movia, el viento tiraba el palo para un costado y Peti que casi perdia la competencia de cinchadas con el mastil (termino con los talones clavados y el traste en la tierra). Por un instante crei que se nos iba todo a la mierda. Creo que las canas nos están pesando mucho.

1 comentarios:

lisi dijo...

AGUANTE EL OMEGA!! (sic Nico)